¿Porque siempre vuelvo al mat? Habitándome

“Un hombre no trata de verse en el agua que corre, sino en el agua tranquila, porque solamente lo que en sí es tranquilo puede dar tranquilidad a otros”. - Confucio
Porque es como volver a mí. Practico desde hace ya unos cuantos años en forma constante. No solamente practico ásana, sino que tambien doy clases, sobre todo a domicilio, por lo que practico varias veces al día. Practico porque es el momento del día, cuando hago mi práctica personal, en la que ME habito. Asi como muchas veces nos tomamos un día para poner en orden nuestros hogares, asi como de repente un día decidimos hacer un orden extremo y desentendernos de lo que ya no usamos, asi como para nosotras, una vez al mes nuestro organismo desecha lo que no precisa, lo que no le es útil...asi...varias veces a la semana pongo en orden, sobre el mat, mi cuerpo y mi mente. Es como resetearme; o como pasar el antivirus.
“Lo que hoy somos es resultado de lo que ayer pensamos, y nuestros actuales pensamientos forjan nuestra vida futura”. - Buda
Recuerdo que en los inicios de mi práctica de Ashtanga el mejor horario para practicar era la media tarde, tipo 16hs... o incluso a las 19. A esa hora estaba con mucha energía y un cuerpo sumamente disponible; incluso para dar clase estaba mucho más despierta, empática, o al menos me resultaba mucho más natural, lo cual era lógico, luego de años de dar clases de actuación y de entrenamiento corporal (Actividades que suelen desarrollarse a partir de las 19hs).
En cambio, practicar a la mañana era casi una tortura; sentía que mi cuerpo no respondía, que todo estaba trabado y requería mucho más esfuerzo. Sin embargo el tener más solicitudes para dar clase por la tarde me obligo a cambiar mis horarios de práctica y bastante tiempo después de haber conseguido una práctica asidua, comencé a practicar de mañana, antes de desayunar incluso, cosa que al principio de solo pensarlo se sentía como una tortura. Al principio fue raro...pero no imposible. En pocos días, fue la gloria!
Descubrí, experimentando y hablando con mis couchs, que por la mañana practicamos con nuestro "verdadero" cuerpo; un cuerpo que aún no entro en acción completamente, que viene de un el descanso reparador y que tambien practicamos con una mente libre...no estamos aún cargados de pensamientos, el día acaba de comenzar...la mente recién está tomando contacto con la realidad...está casi en su punto justo. Entonces surge una práctica más suave, suave porque somos más cuidadosos con las ejecuciones de las ásanas porque el cuerpo está despertando, suave porque nuestra mente está disponible ahí...asomada, mirando, sin inmiscuirse y todo nos resulta mucho más sensorial. En cambio, por la tarde somos súper agiles, estamos corporalmente "on line" nos sentimos disponibles, mucho más maleables, pero la mente está ahí...sumamente presente, acechándonos (jajajaja que trágica! Es la vena artística que surge todo el tiempo, sabrán disculpar). Cuando la mente esta tan presente, tan cargada de tareas pendientes, de las charlas del día, de los pendientes de la semana es un trabajo mucho más arduo dejar de engancharnos con cada pensamiento que surge...dejar de mirar el short de la yogui de enfrente, el pie de la compañera del mat de al lado y como se eleva en vertical casi sin esfuerzo nuestro compañero masculino de la esquina del shala. Por la tarde, incluso solemos creer que los otros nos están mirando, y entonces estamos prestos a enjuiciarnos con las palabras que creemos los otros usan para describirnos.
A ver…no es que todo esto no pueda suceder a cualquier hora del día; mi experiencia, es que por la tarde/noche soy mucho más proclive a distraerme con cualquier cosa.
"Antes de iniciar la labor de cambiar el mundo, da tres vueltas por tu propia casa". - Proverbio Chino
“El Yoga de hecho es una ciencia en la cual tú trabajas contigo mismo. Si tú no quieres trabajar para ti y no quieres medir tu energía, para saber dónde está el bloqueo, está bien. No es para todos”. - Yogi Bhajan
Es mejor practicar por la mañana o por la tarde, por supuesto que no somos todos iguales, hay personas alondra y personas búho y algunos a las 19hs están tan desarmados que se arrastran con su cuerpo como nosotros a la mañana. Yo he comprobado con mi cuerpo que al final todo es cuestión de habito; de auto educarnos, o más precisamente de estar presentes, de habitarnos.
No existe un momento ideal en ningún libro de yoga… o si…muchos, la mayoría (según me han contado, no porque los haya leído todos) La recomendación es practicar por la mañana. Explican los sabios que la hora previa a la aparición del sol, es muy favorable para el yoga y la meditación. En idioma Sánscrito se conoce a esta hora como Brahma Muhurta (se recomienda el horario de las 5:00 a 6:30 am) ya que el cuerpo se encuentra depurado de toxinas.
Siento, que lo mejor que podemos hacer, es probar…no atarnos a un horario creyendo que ese ES nuestro momento. Darnos la chance de probar distintos horarios (y distintos tipos de yoga, o incluso practicar más de un estilo…ya se…esto no es muy ortodoxo)de permitirnos ser mas flexibles de mente… y luego de cuerpo.
Lo mejor que podemos hacer, es disfrutar de todos los horarios posibles…sabiendo que hay alguno que es de nuestra preferencia o que al menos, según como nos sintamos nos conviene uno u otro.
En mi experiencia:
La práctica por la mañana, antes de desayunar, me recarga cuerpo y mente de energía, me deja con una sensación de vitalidad y equilibrio. El día comienza distinto.
Al medio día, o media tarde, me sirve para desconectar de la rutina y resetearme, me refresca, me calma, se genera en mí un segundo amanecer.
Al anochecer o por la noche me permite llegar más relajada a la cama pero debo elegir las ásanas adecuadas pum para arriba y me permite vaciar mi mente antes del descanso nocturno.
Entonces cual es el momento ideal al final?
El momento ideal es ese en el que decidimos subirnos a nuestro mat y respirando entramos a nuestra casa y comenzamos a ponerla en orden. Es el momento en que decidimos habitarnos, por eso creo que lo más importante es la voluntad, la decisión y la constancia.
"El éxito consiste en obtener lo que se desea. La felicidad, en disfrutar lo que se obtiene". - Ralph Emerson